Abuela fallecida

Incertidumbre, Indignación y pesar son las principales emociones de los vecinos a un costado del campo de La Lagunilla, en la aldea del mismo nombre en San Pedro Ayampuc, esto a causa de que encontraron fallecida a Patrocinia López Pineda de 74 años.

Al principio pensaron que de causas naturales, pero varias cosas les ponen en alerta, primero es que encuentran su vivienda toda revuelta como que alguien estuvo buscando algo, segundo que cuando llegó el Ministerio Público en lugar de permitir que de una vez se velara el cuerpo se lo llevaron para hacer exámenes forenses.

Ana Valencia nuera de doña Patrocinia nos explica que los vecinos la conocían con el apodo de Chinita, y que la mañana de hoy 22 de junio la fue a buscar a su casa para desayunar con ella a las 9:00 de la mañana antes de que saliera a sus actividades diarias y fue cuando encontró el cuerpo sin vida dentro de su vivienda, que queda al fondo del mismo terreno donde vive su hijo.

Ana explica: aunque se enfermaba eventualmente no considera que falleció por causas naturales y que el comportamiento del Ministerio Público le parece de lo más sospechoso, como que tienen indicios de algo pero no lo dicen todavía.

La Chinita de La Lagunilla se dedicaba a pedir limosna en el paso a desnivel de La Parroquia zona 6, la hora de su muerte está en el transcurso de la noche anterior pues la última vez que la vio con vida fue a medio día del jueves 21 de junio.

La familia pide a los vecinos su colaboración será velada a un costado del campo en el callejón en el lote 22 en la casa verde, y piden que si pueden colaborar para su caja se los agradecerán mucho, ella siempre decía que le fueran a pedir al alcalde si en caso ella moría para su caja, el hijo se llama Moises López.

Continuación les dejó la entrevista realizada para que escuchen de voz de Ana lo sucedido:



Cuatro días después de haber fallecido consultamos a Ana de cual fue el dictamen del INACIF sobre el fallecimiento de "La Chinita" asegura que según el reporte médico, falleció de un paro cardíaco, descartando el asesinato como la causa y dando resignación a la familia.